Edificio del Diário de Notícias

Texto original escrito en portugués, cedido por el Centro Nacional de Cultura (CNC), traducido y adaptado por sieteLisboas.

Fotografía del edificio del ‘Diário de Notícias’ tomada por sieteLisboas.

En 1936, la Empresa Nacional de Publicidade pidió permiso a la Câmara Municipal de Lisboa (Ayuntamiento) para la construcción de este edificio, en su emplazamiento actual, y así albergar las oficinas del periódico Diário de Notícias. Proyectado en ese mismo año por el arquitecto Porfírio Pardal Monteiro, fue inaugurado y premiado con el Prémio Valmor en 1940.

El edificio tiene sótano y se eleva seis pisos en el lado este de la Avenida da Liberdade, dando su fachada posterior a la Rua Rodrigues Sampaio. De planta rectangular, fue concebido para albergar el “hall” del público, la entrada principal, la redacción y la administración. Todo ello situado en la parte que da a la avenida, mientras que los espacios no colectivos se encuentran localizados en el otro lado.

La fachada sobre la Avenida da Liberdade, en su mayor parte revestida de piedras encajadas, se caracteriza por la sobriedad de la composición y se divide en una torre y un cuerpo. La torre, realizada en bloques, cuenta con la entrada principal, tiene ventanas y está coronada por un módulo luminoso en forma de prisma hexagonal (como un faro).

En el cuerpo destacan los escaparates del “hall” del público, mientras que por encima de la planta baja se levantan los pisos superiores, con ventanas enmarcadas entre finas columnas dobles. Asimismo, en la parte más elevada de este edificio sobresale una cornisa con un letrero luminoso y hay una terraza cubierta.

La fachada Norte está decorada con motivos alusivos al Diário de Notícias y a la prensa.

Fotografía del edificio del ‘Diário de Notícias’ tomada por sieteLisboas.

Por último, la fachada posterior es sobria y simétrica, y se integra discretamente en el conjunto general de la calle.

Respecto al interior del edificio, resaltar que supone un ejemplo de la característica organización racional de los espacios de la obra de Pardal Monteiro: con dos patios de ventilación en la parte central del edificio. También cabe señalar las pinturas murales de José de Almada Negreiros, entre las que destaca la que representa las 24 horas de la producción del periódico, realizada en una viga.

Esta obra arquitectónica traduce la búsqueda de equilibrio entre los vectores estético, funcional y constructivo, de la mano de un arquitecto que es considerado símbolo del Modernismo Portugués.